viernes, 27 de enero de 2006

Carta al Rey



Don Juan Carlos:

Debo decirle que me lo he encontrado en muchas partes , sin que usted se de cuenta. En las monedas de Euro, en estampillas y en la entrega de la copa del rey. Aquí la gente le tiene mucho cariño y causa admiración por su sencillez.
Pero disculpeme usted de no tratarlo como lo hacen sus compatriotas, "su majestad". Don Juan Carlos ,no entiendo mucho de monarquías, ve que fui criado en dictadura.
Hace unas semanas fui a San Lorenzo del Escorial a una hora de Madrid, usted lo conoce ,el monasterio medieval que refleja la austeridad real de la época.






Entré al panteón de los reyes donde está Carlos V , Felipe II y muchos más. Don Juan Carlos no se moleste , pero tiene espacio reservado en zona VIP, al menos no podrá quejarse de no tener donde caerse muerto.


Tanta cinta que corta, en cada inaguración. Tanto cóctel, cenas y cositas ricas, que me llega a dar envidia.
Lo seguiré viendo a diario, al pagar el café, al comprar el periódico o mandarle un carta a algún amigo.
Felicidades por su nieta, Don Juanca a ver si algún día este chileno entiende la monarquía.

Saludos.

sábado, 21 de enero de 2006

Prohibido quitarse los zapatos

Por un televisor de 14 pulgadas y en más de seis idiomas, nos dicen que está prohibido quitarse los zapatos. 10 minutos para eso, cuando solo se necesitaban 10 segundos. Debe ser importante, pensé e intente quitármelos solo para ver lo que pasaba, quizás sonaba una alarma o aparecía la policía. Nunca había meditado tanto antes de quitarme los zapatos.

Me di cuenta que en nuestro viaje en autobús Barcelona-Madrid lo que más tendríamos sería tiempo. Cada cuál lo usaba a su antojo o lo dejaba pasar simplemente. Una boliviana- creo- se lo durmió todo, una gordita española se entretuvo con sus juegos en el móvil. El ecuatoriano de atrás me dejó enfermo con su colección de salsas en Cds. El colombiano del asiento 12 fue el único que vio la película - por un euro conseguías los audífonos para escuchar una peli antigua.
En un momento la peli se paró y la pantalla se puso azul, el colombiano miraba para todos lados, buscando cómplices de su entretención, pero no halló a nadie y su timidez de inmigrante no le permitió reclamar para ver el final de tan apasionante film.
“Vamos a parar 10 minutos” dijo el chofer por altoparlantes. El colombiano se fumo un cigarro y vio al regreso el final de la peli, que se puso en pantalla otra vez. Yo un café con leche. y estirar un poco las piernas. La boliviana ni se bajo.

En un autobús para 40, solo íbamos 15, que queríamos ahorrarnos dinero a cambio de pasar 7 horas en el bus. A pesar de que nadie se atrevió a quitarse los zapatos, salvó un chino que fue corregido por el conductor, a las 5 horas ya había olor a zoológico y una calefacción excesiva, que no ayudaba en nada.

Me leí un par de cuentos y ya entrábamos a Madrid momento de ir al baño a lavarme la cara, por supuesto no había jabón y parecía un malabarista de circo al intentar apretar la llave, que cayera el agua sobre mis manos y refregarlas al mismo tiempo. Descubrí que si afirmaba la puerta con el codo y apoyaba mis rodillas contra el lavamanos, agachaba mi cabeza y me doblaba en 75 grados sin estirar el codo podría lavarme las manos sin dificultad.

La boliviana seguía durmiendo y el chino había vuelto a quitarse los zapatos.

En un momento ya habíamos llegado, el ecuatoriano se bajó con una caja y su colección de cd, el chino con una sonrisa, la gordita con su móvil sin batería y el colombiano con los audífonos de recuerdo y deseoso de contar la película a su amada que lo esperaba. Ahh la boliviana despertó, se arreglo un poco el pelo con sus manos, paso sus dedos por sus ojos, bostezó y se bajo.

miércoles, 18 de enero de 2006

Habemus piso


Y salió humo blanco, aunque en bastante más tiempo que en las convocatorias eclesiásticas. No fue sencillo por nuestro poco tiempo en tierra española. Claro piden estabilidad y este caso resultaba imposible. Más aún que hace un mes había renunciado a mi trabajo y disfrutaba de un viaje inolvidable a la isla del mediterráneo. Pero la vuelta no era fácil y la estabilidad pedida no existía por más que lo quisiera. Fueron varios días de ver departamentos, de que nos gustara y todo se frustrara, de caminar, de tomarse un café y volver a casa. Llegué a tener un contrato en mi mano hace unos días atrás, solo bastaba firmarlo. No contaba con la desaparición de la dueña, aún sin explicación. Hasta sospecho que se la llevó un ovni. Fue el momento más difícil y estuvimos a un paso de tirar la toalla.
Manos y brazos cruzadas. El plan B se acercaba a límites indeseados. El optimismo disminuía y un fin de semana en Madrid fue bueno en mí para recobrar fuerzas, respirar y disminuir la tensión en nosotros.
A mi regreso nos esperaba el piso exacto al que buscamos, estábamos nerviosos y temíamos que una vez más, el pan se quemara en la puerta del horno.
Parecíamos huasos, visitando Santiago. Tomábamos el metro incorrecto, peleábamos dentro del banco y con papeles y entidades sociales que jamás había escuchado en mi vida. Nos comimos todos los caramelos del banco y no nos dimos cuenta de la ansiedad
Con móvil en mano, preguntado a un amigo ¿que es un aval bancario?, ¿que es el instituto de suelo?, ¿que es la cámara de comercio? Se portó bien el amigo y me tuvo paciencia, nos tuvo paciencia.
Apostamos todo y con esfuerzo en conjunto hoy 17 de enero del 2005, firmamos contrato, nos entregaron las llaves y nos crearon ilusión. Sant Andreu se llama el barrio, a 200 metros del metro y a 400 de una estación de trenes, a pasos de supermercados, tiendas y demasés. Con una terraza de 40 metros cuadrados que será el deleite de los días estivales.
Estamos contentos, hay que decirlo hoy habemus piso!

jueves, 12 de enero de 2006

Bicicleta de cartón

Cierto día Benjamín no tenia niños con quien jugar, estaba triste. Por la noche no podía dormir, se daba vueltas y vueltas en la cama ,pero en un momento se le ocurrió una idea, se levantó al instante, entusiasmado y en silencio. Como el siempre deseo tener una bicicleta y a pesar de sus padres se la prometieron, pasaba el tiempo y aún no llegaba. Benjamín tanto la quería que esa noche el mismo se fabricó su soñada bicicleta, con ella el iría a muchas partes y conocería muchos niños y tendría muchos amigos.
Benjamín hizo su bicicleta con cartón, pero era linda, plagada de colores, se la hizo con cartones rojos, azules y amarillos y hasta con luces!. Y así, todos los días Benjamín se levantaba muy temprano para subirse a su bicicleta e ir alguna parte.
El soñaba con ir a la luna y su bicicleta lo llevó allí, pudo ver la tierra muy pequeña y le dio un ataque de risa, al ver a sus padres tan pequeñitos y al tío Julián que mide dos metros lo veía del tamaño de una hormiga, lloraba de la risa. Aún así en la luna no encontró a amigos.
Benjamín quería tener amigos negros y decidió ir a África a buscarlos, ese día se levantó más temprano que nunca, le habían dicho que África quedaba muuuuy lejos. “Gastaré mucha energía para ir allí” pensó el niño y tomó doble desayuno, doble cola-cao y dos panes con palta. Apenas se los pudo comer el pobre Benjamín, no se podía mover tan gordo que quedo, de todas formas se llevó un yogurt con frutas para el camino. Y partió con su bicicleta de cartón, de cartones rojos, azules y amarillos. El era un niño generoso y se hizo de muchos amigos en África, a todos ellos les enseño a hacerse sus propias bicicletas. Los niños estaban felices, con sus bicicletas de colores, todas eran distintas y cada uno podía ir lugares distintos. El yoghurt se lo regalo al más tímido y silencioso de todos.

Cuando Benjamín quiso ir a ver el sol, fue más complicado, le dio mucho calor y el pensó que lo mejor sería darse un chapuzón en una piscina y tomarse un jugo de frambuesas con pepitas de verdad. Pero los rayos brillantes lo alucinaron y aguantó junto al sol lo que más pudo. El era valiente y aguantó mucho tiempo. Tanto tiempo estuvo allí que llegó hacerse amigo del sol.

El pequeño viajaba todos los días y recorrió todo el mundo, las estrellas, el mar, voló con las aves, un día visitó y nadó con sus los delfines y se hizo de muchos, muchos amigos.

Había una visita que le faltaba, el nunca había ido a ver a un grupo de adultos. Benjamín quería mostrarles su bicicleta de cartón y fue entusiasmado pero con temor, por primera vez el hacía un viaje con temor.

Y llegó a una ciudad grande, donde la gente corría, miraban muchas veces el reloj y se empujaban. Benjamín ni siquiera tenía reloj, el solo tenía su bicicleta y sus amigos. Un hombre pasó tan rápido que le rompió la luz de su bicicleta, el se puso muy triste porque el señor ni siquiera se dio cuenta. Los” grandes”, se reían de su bicicleta de cartón. “Con esa bicicleta no vas a llegar a ninguna parte”, le dijo un hombre de maletín. No pudo subir su bicicleta de cartón al metro, entonces intentó avanzar por la calle, pero los autos hacían sonar la bocina tan fuerte que Benjamín se asustaba.
Con su bicicleta a su lado logró llegar a una reparadora de bicicletas. “Miré señor, por favor necesito que le ponga aire a las ruedas de mi bicicleta y que le cambie la luz de la derecha que me la rompieron”. “No molestes niño, tengo mucho trabajo, además esa es una bicicleta de cartón que no sirve para nada”
Benjamín lloró y no pudo arreglar su bicicleta nunca, con el tiempo el fue creciendo y los adultos ya no lo dejaban soñar , el tenía que “tomarse las cosas en serio”, trabajar , juntar mucho dinero para ser feliz, y poder comprarse muchas cosas, ser éxitoso , ser muy fuerte y el mejor de todos.
Aún así Benjamín recordaba cada noche su bicicleta de cartón de colores rojos, azules y amarillos.

Fin

martes, 10 de enero de 2006

Tiempo de rebajas



Espero que se acaben las fiestas de una buena vez. Vale, el 24 y el 31 es normal dentro de todo, pero el 6 de enero otra vez!!!. Cada español gasta 1000 € en promedio en estas fechas, me parece una locura pero no hay nada que hacer. Y yo el ingenuo que pensaba que se hacían regalos solo para el 6, para los reyes. No, también para la navidad americana, para las dos. Expertos en la materia recomiendan, guardar algunos juguetes y entregárselos a los niños en marzo, para no “saturarlos” ¿brillantes no? Súmese cenas especiales a destajo, la cosa es gastar, como que esos mil euros los perdieras si no los utilizaras. Como que los tuvieras que devolver . Oye no es menor, son cinco sueldos básicos chilenos.
Yo pensé que todo terminaba este día seis de enero y que por fin todo volvería a la normalidad, que la gente se pondría a trabajar de una vez por todas.

Me equivoqué

No solo porque en el supermercado los carros siguen llenos.
Hoy fui a Barcelona a tomarme un café donde trabaja mi hermana. El trayecto me hizo cambiar de idea y el café se convirtió sin que lo notara en una cerveza heladita, mucha calefacción en el mall. Luego descubro un fenómeno nunca antes visto.





Acostumbrado a que la gente se gaste todo y más, y que quede sin plata ni para comprarse un helado, aparece de sorpresa otra fiesta…” las rebajas” no señores, no son como las de Hites, Tricot o Almacenes París. Estas son de verdad.
Todo el mall se viste de rebajas, todo a mitad de precio miércale!!!.

Y vamos comprando, impresionante es poco decir, cualquiera pensaría que regalaban la ropa. Tiendas repletas y con filas interminables. Todos, ojo todos con una o varias bolsas de compras.

Yo iba con las manos en los bolsillos “a mirar” como chileno en el shopping del 14, “no necesito nada”…

Pero no hay quien se resista. Lo que más tengo son camisas, mi hermana dice que tengo cara de camisa, todavía no se bien que significa, confieso más de cinco sin abrir, finalmente ocupo siempre las mismas, las “regalonas” que son como 20. Pero no pude resistirme, lo intenté, es que…estaba en oferta!!!. ¿Como no me la iba a traer?. Si, otra camisa más.
Ahora si la ocupo o no, es otra cuestión sin importancia.
De todas formas me siento con mi conciencia tranquila, me gasté solo 10 euros en estas fechas y les bajé el promedio a los españoles…perdón fueron 15 no conté unos guantes.
Pero me froto las manos ( sin los guantes) ya pronto vienen las segundas rebajas!!! Esas si que son buenas. Esas si que no me las pierdo.

sábado, 7 de enero de 2006

No teniamos celulares

“Anda a preguntarle a la señora Alicia si me llamo alguien” – insistía mi madre – “otra vez mamá” decía yo , un tanto enojado“ estoy cansado de ir donde la vecina cada vez a preguntar si alguien dejo un recado para ti, podrías comprarte un teléfono”
Cuando era niño no existían el teléfono móvil, ni de ningún tipo para nosotros, 779442, fue el primer número que me aprendí, el de la señora Alicia nuestra bondadosa vecina. “Por si te pasa algo, debes saberte el número de memoria”. Me lo dijo mi madre y yo lo aprendí., lo recuerdo hasta hoy. Yo tenía una buena vecina que me regalaba chocolates.

Nuestro televisor solo era en blanco y negro y con una perilla para cambiar los canales. A mi hermano mayor se le ocurrió un sistema para apagar el televisor sin necesidad de levantarse de la cama. El sistema innovador para ese entonces consistía en un palo de escoba y unos cuatro metros de cordel. Pero tan habiloso no era, si quería cambiar del siete al trece, había que levantarse igual. Era mejor meditar con antelación y elegir un único canal que nos animara aquella noche. Durante los comerciales nosotros jugábamos.

Los cassetes de Silvio Rodríguez de mi madre, se gastaron de tanto escucharlos. Con el paso de los años en lugar de tener la voz más grave, Silvio la tenía cada vez más fina. Fue cuando me dí cuenta que los cassetes cumplían su ciclo. Yo me aprendía las historias de sus canciones.

Y con los juegos de computador algo parecido , al Atari 800 xl teniamos que “cargarlo” con cintas . Con mi hermano cruzábamos los dedos para que Bruce Lee no se estropeara en las últimas dos vueltas. Pero mientras se cargaba conversábamos y reíamos.

No existían los celulares, ni los computadores portátiles. Ni Internet, ni los cd , dvd o mp3 . Pero nunca faltaron nuestros juegos, ni nuestra imaginación, ni nuestra vecina ni nuestra madre. Nunca me faltaron mis hermanos.

jueves, 5 de enero de 2006

Evo y el Rey


¿Podrían distinguir entre a un africano de Somalia a uno del Congo?, no, no es posible, ellos son simplemente "negros". Así mismo para muchos españoles los sudamericanos somos todos iguales. No logran distinguir si el personaje en cuestión es colombiano, chileno, boliviano o peruano.

Por estos días el personaje aquí en España es el presidente electo boliviano Evo Morales. Hace un par de semanas se rieron de el , cuando un falso Zapatero ( un humorista imitó la voz del presidente español) lo felicitaba por su victoria en las urnas. Morales agradecía feliz todas las palabras de su "colega español".Cayó redondito
Ahora Evo está en España y entre hombres de trajes viste chalecos de colores. En su visita al rey lució unos de sus preferidos a rayas.
Don Evo con todo respeto , mire se lo digo con cariño. Le propongo que hagan una vaquita en su país y le compren un traje. No le vendría mal una cortaita de pelo también .No es mi intención pasar a llevar a los Aymaras y Quechuas que representa, de hecho pienso que estarían orgulloso de ústed. Se lo pido por favor ve que después nos meten a todos al mismo saco y pasamos vergüenza. No se me enojé Don Evo se lo digo con cariño.

Preparándonos


Desperté con dolor de cuello. A cualquiera le pasa, sobretodo porque ayer camine por las calles con un colchón arriba de mi cabeza. Seis cuadras y con mi madre adelante guiándome entre los pasos de cebra y el puente. Pasó un camión y casi se me voló, mi madre... y el colchón. La gente se paso de "sapa", si ya me miran de pie a cabeza imagínense con un colchón arriba de la cabeza. No me miran porque sea lindo, yo cacho que están aburridos. Es impresionante nunca había visto gente tan sapa. Catalanes de pueblo. Yo caminaba lento para que mi madre alcanzará a comprar un baguette y queso manchego, a la pasada, para la once, ¿buena once no?
Nos estamos preparando para ir pronto a Barcelona y nos regalaron un colchón para la cama de mi hermana, ahí la gente ni te mira de lo apurados que están, hay que esquivar los empujones en el metro.
Preparándonos para el nuevo desafío.

La foto corresponde a Igualada, el pueblo donde vivo ahora a unos 50 kilómetros de Barcelona

martes, 3 de enero de 2006

Se busca Piso



Familia aburrida de los pueblitos urbanos busca departamento de alquiler en Barcelona.
Se requiere que tenga al menos 3 habitaciones , ojalá los más separada una de otra para evitar posibles conflictos. Otras habitaciones serán bienvenidas para recibir a la familia y amigos.
Si tiene dos baños mejor, a lo menos uno con tina para los baños de sal de la madre. Si tiene solo 1 nos la arreglamos con duchas más cortas.
Si no está pintada no importa , no tenemos las manos crespas y somos trabajadores.
Idealmente en un entorno grato y con un parque cerca, donde ver los árboles de colores y poder pisar las hojas secas en el otoño, se valora que tenga una piscina y un salón del reino cerca para el hermano, que se lo merece.
Decimos de frentón que no queremos vecinos fregados, si es el caso agradecemos que se abstenga.
No es imprescindible ascensor, no es molesto subir escaleras hasta un nivel más o menos razonable, digamos que entre dos y tres pisos.
Ofrecemos estabilidad económica, es decir le vamos a pagar, estabilidad emocional es más complicado pero no creo que le afecte. El dinero podrá descontarlo de la cuenta independiente de que si estamos tristes o alegres, aunque si el piso tiene ventanas iluminadas y buena vista, será más difícil que nos hagamos los locos.
Cualquier oferta porfavor hagalá llegar cuanto antes, que mi reserva de chocolates está que se acaba ¿ Nunca ah estado con una madre y una hermana ansiosa?

domingo, 1 de enero de 2006

Relatos sin editar

Estimados:

Ya lo ven, este es mi nuevo blog. Autonecesidad lo reconozco. Espero compartir con vosotros relatos sin editar de mis días fuera de Chile. Pronto.