Londres, el final

Fue extraño, fueron 20 días sin ver a otro sudamericano ni a ningún marroquí que tanto abundan por España… que tanto abundamos. En Londres vi a muchos hindúes y sentí que no representaban ninguna molestia para los residentes ingleses, solo se distinguían por su color de piel y por sus vestimentas, pero en comportamiento exterior no eran distintos. Aquello derribo unos de los mitos que llevaba en mi maleta: encontrar a un país xenófobo . No fue así y aunque mi visión es sesgada fue mi sentir al relacionarme con los ingleses durante diez días. Al segundo día una mujer de unos cuarenta años , me da un leve golpe en mi hombro en una esquina a la espera de la luz verde en un semáforo, ni siquiera esperaba disculpas y mayor fue mi sorpresa cuando dijo “sorry, love”. Gente que te mantiene la puerta abierta al entrar a un lugar, e incluso sonrisas amables fue lo que encontré.

Para los que estamos acostumbrados a vivir en dictadura y en intentos de democracia socialista no logramos entender la monarquía. Cuando niño aprendí en los cuentos que el rey, vive con la reina en un palacio, en el ajedrez la figura del Rey es acompañada por la dama que tiene la facultad de moverse en diagonal, comiéndose con poca discreción a quien se cruce por delante. Pero la realidad no es así en Inglaterra solo existe el Rey o la Reina nunca los dos a la vez. Menuda desilusión.

En cada restaurant o bar habían vinos chilenos en primera fila, caliterras y el clásico de concha y toro “casillero del diablo” . A un precio bastante razonable , aunque cuatro veces más alto de lo que valdría en Chile, lógicamente.

Esto junto al moai y los dos goles de Marcelo Salas a los ingleses en Wembley , hace casi diez años, fue lo único que llevo Chile a mi mente. Al pasar por allí, fue inevitable no recordarlos e incluso volver a saborearlos. Cosas de un chileno escaso de triunfos deportivos nada más.

Abundan los espectáculos musicales en los teatros de Londres y reservamos tiquet para ver “ We will Rock You” , con la música de Queen y un sonido impecable. Aquel gusto musical es heredado de mi hermano Cristóbal , junto a el intentábamos que mi hermana pequeña cantara las canciones de Queen. “Aguanero” ( I Want it all) decía Valentina con cuatro años.


Ver un Gig(Show) en vivo de Symeon fue otro momento destacado para mí, logró que todo el público me identificara cuando contó algunos de mis intentos de hablar inglés y pronunciaciones curiosas. Si al entrar pase desapercibido, la gente al salir me sonreía. Era claro que yo era el amigo Chileno.


Quedaron cosas pendientes , siempre ocurre. Pero quien sabe, quizás algún día este nuevamente en estas tierras extrañas.

O en otras

Windsor

Un día entre castillos y banderas.
Aquí es donde la Reina tiene su "cabañita" de descanso.

Encuentro entre chilenos.

Este ah sido el único chileno que me he encontrado en estos días. Lo vi un tanto serio y por más que intenté conversar con el, no fue posible. Ni siquiera para la foto sonrió.
En el museo británico habían muchas imágenes que solo había visto en libros y verlas a centímetros de mi realmente me impacto. Nunca había visto a un moai de cerca, ni la figura de Alejandro Magno ni las momias egipcias.

Aún así , si tuviera que decir que fue lo que más me llamo la atención, fueron los dibujos de los asirios en las paredes, cuando el rey mataba a los leones, cuando solo el podía hacerlo.
Soy lector habitual de la Biblia y aquí vi muchas imágenes y momentos de historia que hicieron acercarme al pasado…al presente.
Quisiera haber visto algo de babilonia, pero no lo hallé.

No he encontrado a más chilenos de momento, solo a una jamaicana que intentaba hablar español, con cierta simpatía.

Londres , un té con la reina.

Hace muchos días que no sentía frio y las tres horas de vuelo marcaban que estaba en otro sitio con rapidez.
Parecía un niño de cinco años leyendo cada letrero que se cruzaba por mis ojos, leyéndolo en voz alta y aprendiendo palabras y expresiones nuevas.
Tuve que abrigarme, nuestra llegada fue de madrugada y aún nos faltaban 40 minutos en coche para llegar a la casa donde pasaría los próximos diez días.

En mi segundo día en Inglaterra, solo al comprar el tiquet del tren me di cuenta que el nivel de vida de los ingleses es distinto al de los españoles. “Very expensive” debe haber sido mi frase más utilizada aquel día.
Fue un día de mirada general por Londres. Las casetas telefónicas, los buses de dos pisos y el palacio Buckengham ,donde se me explicó que si la bandera está alzada es porque está la reina allí en ese momento. Sospeché ,por la hora, que nuestra estimada reina se estaba pegando una tonta siesta.
Los guardias se deben aburrir, como todos los guardias, pero al menos a estos les sacan fotos y toda la gente espera el “cambio de guardia”. Son los famosos anónimos.

Como no, luego de aquello el emblemático big ben, distinguido por su fiabilidad.

El día terminó con un par de cervezas francesas en Soho. A esas alturas la reina debía estar tomándose su último té, ojo, siempre con leche.

Calpe

Aquella es la vista desde el departamento que hemos alquilado en Calpe, Alicante. Tomar desayuno o cenar viendo el mar es impagable. En verdad si es pagable pero son pequeños gustitos.
He ido a la playa cada día y estoy más moreno que nunca.
No parece que estoy en España, aquí esta lleno de extranjeros. Alemanes ,ingleses y franceses. Logro entender porque a España ingresa tanto dinero por los turistas.
Seguiré disfrutando, el próximo nado en el mediterráneo me lo doy por vosotros.
Aunque ahora no llego hasta la boya, nado por la orillita. Hace dos días me picó una medusa, que ni siquiera se si pican, muerden o tiran veneno, pero por dios que me dolió.

Mosaicos

Se acabaron los recuentos y reediciones con la visita al parque Güell , reconocido patrimonio Mundial por la UNESCO. Obra del arquitecto catalán Antoni Gaudí.
A nadie deja indiferente la magia de sus mosaicos . Nos encontramos con muchos extranjeros que caminaron 1500 metros desde el metro, pero aún todo sudorosos llegaron hasta arriba, llegamos hasta arriba
Solo me dolió pagar 4 .5 euros ($ 3000 chilenos) por 300 cc de cerveza. Era necesario porque la combinación de el calor y´húmedad catalana no son buenos compañeros .Valió la pena , nos refugiamos bajo un toldo y disfruté buena conversación junto a mi amigo madrileño... viendo los mosaicos de colores.
En unas horas parto rumbo a Alicante, reconozco ansiedad.

Mi mayor tesoro

Mi mayor tesoro

Un día de estos, un día de sol un niño muy alegre me preguntó ¿cuál es el regalo que más te ha gustado? Un hombre mayor un día cualquiera me preguntó ¿cuál es tu mayor tesoro?
Muchas veces sueño, y aunque difícilmente me acuerdo, lo que si se, es que sueño en blanco y negro. Muchos dicen que se sueña en colores, pero no, yo sueño en blanco y negro porque los paisajes y aventuras son menos importantes que en la vida real. Con soñarlos en blanco y negro es suficiente para mí.
Pero mis mayores tesoros, mis mayores regalos, cuando aparecen, los sueño en colores, con todos los colores que existen y que mis ojos incluso durmiendo son capaces de ver.
Cuando en mis sueños aparecen mis amigos los veo en colores, siempre en colores. Aunque fuera en sueños, en blanco y negro, no sería suficiente.
He aquí mi mejor regalo, he aquí mi mayor tesoro.
Soñado en colores.
Con todos los colores.

Escrito en mayo del 2006, luego de un sueño