Está es la entrada ciento uno de este blog, que se renueva o simplemente desaparece y va como miles de blogs al cementerio virtual. No quiero transformarlo en un blog gastronómico, porque existen muchísimos. Seguirá siendo un blog personal pero si con marcada tendencia a los fogones. Coincide con mi etapa profesional de mayor intensidad. Luego de fregar el piso de una cafetería en Cervera por las noches, de limpiar la campana con grasa cada domingo en un restaurant de Barcelona y de asumir tareas largas y tediosas dentro de la cocina ,tengo la sensación de que mi etapa de novato en tierras españolas ha concluido. Para los que tengo cerca sabrán que asumo mis nuevos desafíos con la misma sencillez de siempre. Muy agradecido de mis compañeros de trabajo que me han permitido ejercer liderazgo, de que nuevamente y ahora en tierras extrañas, tenga " mi cocina". Ser Chef de un catering, requiere responsabilidad y enriquece profundamente: investigar y crear nuevas tendencias, labor de enseñanza y responsabilidad social,diferentes tipos de relaciones profesionales.
Disfruto ahora de una étapa de estabilidad.
Y tengo la certeza de que de esta tribuna si tengo algo nuevo que contar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario