lunes, 12 de marzo de 2007

Las bicicletas de Amsterdam




Vi más bicicletas que autos. Ni metro, ni buses, solo tranvías. Gente más alta que yo, lo que no es difícil. Pero hasta los maniquíes hacían sentirme pequeño. Y claro, es la comunidad considerada la de mayor estatura, por sobre los americanos atiborrados de papas fritas del Mc Donalds
Con solo 600.000 habitantes Ámsterdam es una cuidad de cuentos infantiles por sus canales y calles de adoquines .De historias de adultos con sus barrios rojos, mujeres en vitrinas y cafeterías con aromas de marihuana.
Caminatas entre calles estrechas con bufanda y manos que frotar intentando escapar de este invierno de improviso para mí, luego de mis tardes de verano en Santiago y Buenos Aires.





Una genialidad encontré las bicicletas que me recordaron a Zurich. El transporte preferido y el más agradecido. Todas ellas con las mismas características, con similares formas. Sobre ellas todo tipo de personas. Universitarios, dueñas de casas, ejecutivos, prostitutas y albañiles.
Fue curioso estar en un país bajo el nivel de mar. Logré entenderlo al verlo desde alto. Una nación a la que todos llamamos Holanda, cuando su nombre oficial es “Países Bajos” y Holanda solo es una parte de esta comunidad.
Creo que Amsterdam debe estar sin duda dentro de mis “top cinco” de ciudades favoritas: súmese Friburgo, Valleta, Barcelona y Zurich.





La mayor parte de mi tiempo la pase en una cuidad a cuarenta y cinco minutos de la capital: Den Haag. Donde me atreví, con mapa en mano a recorrerla, dentro de mis posibilidades. Los nombres de las calles eran indescifrables y pase más tiempo intentando no perderme que de caminar con libertad. Agradecí cuando hubo quien se ofreció para hacerme de guía.
Y fue ahí cuando aprecie toda su arquitectura, el hablar de la gente en el mercado.

Solo con mis manos en los bolsillos y mi vista al frente, a veces hacía abajo. A los Países Bajos.

2 comentarios:

cmcgato dijo...

Genial, esa es una sociedad conciente de las mejores formas de transportarse. Ojala que aqui en Chile alguna vez se promueva el uso de la bicicleta como medio de transporte, mucho cambiaría la ciudad, eso unido a un sistema de transporte público hiper digno y a políticas anti-auto, seguramente le cambiarían el rostro a la ciudad.

Bonito tu viaje por los Países Bajos, cuya sociedad es una de las más tolerantes en todo aspecto around the world. Aún le falta si ganar un mundial de fútbol, jaja

En fin, que buena que la pasaste super, asi se ve, ojala que hayan más viajes, porque andas como el Profesor Rossa, que recorre el mundo...:D

Nos vemos!

RCB dijo...

Amsterdam es una ciudad realmente interesante. Sabes si terminaron la nueva línea de metro? La última vez que estuve, estaba todo lleno de hoyos cerca de la estación central? En todo caso, la sociedad ya no es tan tolerante como solía ser, sobre todo en lo referido a los extranjeros. Como dice una amiga, la gente se aprovechó y ahora pagan justos por pecadores. Den Haag en todo caso es completamente diferente... Saludos